Los índices bursátiles estadounidenses cerraron en negativo el viernes, después de que las ganancias matinales resultaran efímeras. Los inversores analizaron los nuevos datos de inflación y tuvieron en cuenta la incertidumbre política tras el debate presidencial estadounidense.

Las acciones de Nike sufrieron su mayor caída en un día en 20 años debido a las desfavorables perspectivas.

"No creo que la inflación cambie mucho, ya que la Reserva Federal se toma en serio su objetivo del 2% y mantiene una disciplina estricta", afirmó Ann Miletti, responsable de renta variable activa de Allspring.

Los datos mostraron que la inflación mensual de EE.UU. en mayo se mantuvo sin cambios. Fue una señal alentadora tras el repunte de los precios a principios de año, que suscitó dudas sobre la eficacia de la política de la Reserva Federal.

El informe del Departamento de Comercio también apuntaba a un ligero aumento del gasto de los consumidores el mes pasado. Ello aumentó el optimismo sobre la posibilidad de que la Fed logre un aterrizaje suave de la economía.

La probabilidad de un recorte de los tipos en septiembre subió al 66% tras la publicación del índice de precios del gasto de consumo personal, según LSEG FedWatch.

A pesar de las previsiones de la Fed de un solo recorte de tipos este año, los operadores siguen apostando por dos recortes, con la esperanza de un nuevo descenso de la inflación.

El primer debate del jueves entre el presidente de EE.UU., Joe Biden, y su oponente republicano, Donald Trump, también impactó en el mercado bursátil, dijo Thomas Martin, gestor senior de carteras de Globalt Investments, haciendo hincapié en la actuación poco concluyente del actual mandatario.

"La gente está intentando averiguar qué va a pasar con las elecciones presidenciales. Tras el debate, la incertidumbre no ha hecho más que aumentar", afirmó.

Los rendimientos del Tesoro se recuperaron de las pérdidas de la mañana y terminaron el día al alza, lo que aumentó la presión sobre los valores de gran capitalización.

La presidenta del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, Mary Daly, destacó la ralentización de la inflación y la calificó de "buena noticia" que confirma la eficacia de la política monetaria. La gobernadora de la Fed, Michelle Bowman, afirmó que el banco central mantendrá el rumbo, ya que aún no se ha alcanzado el objetivo de inflación.

Los índices S&P 500 de energía (.SPNY) e inmobiliario (.SPLRCR) subieron un 0,42% y un 0,62%, respectivamente, mientras que los valores de servicios públicos (.SPLRCU) y telecomunicaciones (.SPLRCL) bajaron un 1,08% y un 1,63%.

Las acciones de Nike (NKE.N) cayeron un 19,98% tras pronosticar un importante descenso de los ingresos en el ejercicio fiscal 2025, lo que presionó a todo el sector de consumo discrecional (.SPLRCD).

El índice industrial Dow Jones (.DJI) cayó 41,12 puntos, o un 0,11%, hasta 39.122,94 puntos. El índice S&P 500 (.SPX) perdió 22,57 puntos, o un 0,41%, para situarse en 5.460,30, mientras que el índice compuesto Nasdaq (.IXIC) cayó 126,08 puntos, o un 0,71%, hasta 17.732,60.

El volumen de negociación aumentó hacia el final de la sesión, cuando el FTSE Russell completó el reajuste de sus índices. Fue el segundo mayor volumen diario de este año.

Los índices S&P 500 y Nasdaq registraron ganancias trimestrales del 3,9% y el 8,3%, respectivamente. Por su parte, el índice Dow (.DJI) cayó un 1,7%, lo que pone de manifiesto las diferencias entre los índices más tecnológicos y el resto del mercado.

Entre las acciones individuales se destacaron los títulos del fabricante de equipos de redes ópticas Infinera (INFN.O), que saltaron un 15,78% después de que Nokia (NOKIA.HE) anunciara planes para adquirir la empresa por 2.300 millones de dólares.

En la Bolsa de Nueva York, los valores alcistas superaron a los bajistas en una proporción de 1,29 a 1. Se registraron 271 nuevos máximos y 1,5 nuevos mínimos.

El índice S&P 500 marcó 16 nuevos máximos de 52 semanas y un nuevo mínimo, mientras que el índice compuesto Nasdaq registró 58 nuevos máximos y 139 nuevos mínimos.

Los informes económicos previstos y el discurso del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ante el Congreso podrían sacar a la deuda pública estadounidense de su estrecho rango de negociación actual.

La rentabilidad de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años, que se mueve de forma inversa a sus precios, ha subido a un rango de entre el 4,20% y el 4,35% desde mediados de junio. Esto se debe a la reacción del mercado a los datos que apuntan a una ralentización de la inflación y a las señales de debilitamiento del crecimiento económico en una serie de indicadores. El viernes, el rendimiento del bono a 10 años se situó en el 4,33%.

Hasta ahora, los datos económicos no han despejado las dudas sobre la profundidad de los recortes de los tipos de interés de la Reserva Federal este año, lo que ha mantenido los rendimientos de los bonos del Tesoro en un rango fijo. Sin embargo, los datos de empleo de EE.UU. de la próxima semana, así como los nuevos datos de inflación y el discurso de Jerome Powell podrían cambiar esta perspectiva.

Según un informe publicado el viernes, la inflación mensual estadounidense, medida por el índice de precios del Gasto en Consumo Personal (PCE), se mantuvo sin cambios en mayo. Esto confirma una tendencia de ralentización de la inflación y de crecimiento económico constante, que ha estabilizado la volatilidad del mercado de renta fija y apoyado a la renta variable en las últimas semanas.

Sin embargo, los futuros de los tipos de los fondos federales indicaron que los operadores esperan un recorte de los tipos de algo menos de 50 puntos básicos a lo largo del año.

La reacción del mercado a los próximos datos de empleo que se publicarán el próximo viernes podría verse amplificada por la escasa liquidez durante una semana en la que muchos operadores de renta fija estadounidense estarán de vacaciones debido a la festividad del 4 de julio, Día de la Independencia, dijo Hugh Nicola, responsable de renta fija de GenTrust. "El mercado espera acontecimientos más importantes", añadió.

Otros acontecimientos importantes para el mes son la publicación de los datos de precios al consumo, prevista para el 11 de julio. Jerome Powell también tiene previsto pronunciar su declaración semestral sobre política monetaria el 9 de julio ante el Comité Bancario del Senado, según la oficina de su presidente, el senador Sherrod Brown.

Si se mantiene la tradición, Powell ofrecerá una declaración similar ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes al día siguiente.